Tiene propiedades sedantes y emolientes. Las flores están indicadas para la bronquitis y la tos irritante; se emplean en forma de jarabe y son un ingrediente de la tisana pectoral, anodina y expectorante. Es además un suave somnífero. Antiguamente era muy utilizada en las afecciones pulmonares.
Jarabe para la tos, insomnio y estados nerviosos
Macerar cinco cucharadas soperas de pétalos secos y bien desmenuzados en medio litro de agua durante quince minutos. Después de filtrar añadir en caliente azúcar hasta que presente consistencia aceitosa (se precisarán unos 800 gramos). Tomar al día de tres a cinco cucharadas; los menores pueden tomar hasta tres al día.
Infusión de amapola para el insomnio
En un litro de agua hirviendo poner una decena de cápsulas de amapola sin semillas. Dejar reposar un mínimo de quince minutos. Tomar dos o tres cucharadas mezcladas con leche antes de acostarse.
Tisana de amapola para bronquitis y catarros
Mezclar pétalos de amapola con flores de malva, pie de gato y tusílago. Poner un puñado de la mezcla a tomar en un vaso de agua azucarada y bien caliente.
Infusión de amapola emoliente
Para uso tópico, como relajante de los tejidos e inflamaciones cutáneas, añadir a medio litro de agua muy caliente un puñado de pétalos secos de amapolas. Dejar reposar durante quince minutos. Filtrar antes de aplicar sobre la piel.
Mezclar pétalos de amapola con flores de malva, pie de gato y tusílago. Poner un puñado de la mezcla a tomar en un vaso de agua azucarada y bien caliente.
Infusión de amapola emoliente
Para uso tópico, como relajante de los tejidos e inflamaciones cutáneas, añadir a medio litro de agua muy caliente un puñado de pétalos secos de amapolas. Dejar reposar durante quince minutos. Filtrar antes de aplicar sobre la piel.